Cuando las malas sandías explotan sobre las buenas personas

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Nada presagia el verano y su evento principal salpicado de estrellas como una sandía roja, madura y jugosa. Es decir, a menos que su postre dulce y refrescante comience a escupir, silbar y hacer espuma, y ​​luego se vuelva KABLOOEY, arrojando jugos pútridos por todo su picnic o, perezca la idea, arrojando tripas blandas de melón por toda su cocina o mesa festiva.

Entonces, ¿qué tan desagradable puede ser una fruta?

En su mayor parte, nunca encontrará un refrigerio más agradable que la sandía. Es como el John Candy o el Labrador retriever de frutas. Pero de vez en cuando, como otras cosas en la vida, te encuentras con uno malo. Y cuando lo haga, no hay necesidad de enloquecer o repudiar el Citrullus lanatus. En su lugar, sea curioso y sorpréndase, ya que una sandía que explota definitivamente es una historia científica realmente extraña para contar a sus amigos o, mejor aún, un video de YouTube asombroso:

Entonces, ¿qué sucede cuando una sandía se vuelve bromista y explota?

Walter Reeves pesa

El gurú de la jardinería del sureste, Walter Reeves, también conocido como The Georgia Gardener, dice en un correo electrónico que lo que está sucediendo es el proceso de fermentación.

«Sucede porque la sandía está llena de azúcar y una bacteria u hongo de rápido crecimiento entró de alguna manera y se está fermentando. Tal vez algo lo pinchó en el viaje a casa o tal vez tuvo una infección de la enfermedad de la mancha que pasó desapercibida», dice.

«La fermentación hace que se produzcan muchas sustancias químicas diferentes. Algunas huelen a alcohol, algunas huelen a vinagre, algunas son florales, etc. La fermentación produce gas de dióxido de carbono, que silba cuando sale de la corteza bajo una ligera presión. Así que la respuesta simple es que una sandía puede fermentar adentro y la presión puede causar varios efectos», dice el locutor de radio y televisión jubilado, autor y columnista semanal de jardinería del Atlanta Journal-Constitution.

Piense en el sonido de «efervescencia como loco» que hace un refresco cuando agita la lata antes de abrirla.

La infección bacteriana puede ser otra razón por la cual una sandía se parte.

«La enfermedad de la mancha bacteriana proviene de semillas infectadas y solo afecta la cáscara», dice Reeves. «No se propaga hacia el interior. Pero si la mancha se agrieta, otras bacterias y hongos pueden atravesar las grietas hacia el interior de la fruta y comenzar la fermentación. Si encuentra una sandía infectada con solo una pequeña mancha en la cáscara, la el interior debe estar bien. Pero si el interior huele mal o parece acuoso, no lo comas».

Las sandías son más del 90 por ciento de agua. Entonces, ¿qué sucede cuando estalla una sandía?

«Expulsa fluido violentamente», dice Reeves. Piensa en una mini erupción volcánica.

«La explosión», dice Reeves, «puede ser causada por factores genéticos que influyen en el grosor de la corteza, la pulpa azucarada y el tamaño pequeño de la fruta. Corteza fina + pulpa superdulce (que absorbe fácilmente el agua) = ¡BOOM! en un día caluroso».

El gen de la sandía explosiva

Entonces, ¿es cierto que hay un «gen explosivo»?

La división o «explosión» de la sandía también puede ser causada por el gen de la cáscara explosiva que se encuentra en muchas variedades tradicionales. La Dra. Penelope Perkins-Veazie, fisióloga de plantas y profesora de horticultura en la Universidad Estatal de Carolina del Norte (NCSU), dice en un correo electrónico que el gen de la cáscara explosiva se identificó en 1937. Básicamente, hace que la cáscara de la fruta reviente o se parta cuando se corta. .

«Entonces, un pequeño bulto abrirá la cáscara y la presión de la turgencia en la fruta empujará la pulpa a lo largo y ancho», dice Perkins-Veazie. «triploide [or seedless] las sandías requieren diploide [seeded] polinizadores, pero por lo general los productores no quieren cosechar muchas sandías con semillas grandes. Por lo tanto, incorporar el gen de la cáscara explosiva en la fruta polinizadora con semillas y frutos pequeños significa que se pueden pisar y destruir, pero las frutas son lo suficientemente pequeñas (generalmente del tamaño de la palma de la mano) para que no se derramen sobre la fruta sin semillas».

Mark Twain una vez proclamó la sandía, «el principal de los lujos de este mundo, rey por la gracia de Dios sobre todos los frutos de la tierra. Cuando uno la ha probado, sabe lo que comen los ángeles».

Mark Twain nunca debe haber encontrado lo que Walter Reeves describe como el «charco de mierda pegajoso, pegajoso y asqueroso» dejado por una catastrófica falla en la cáscara de la sandía. De lo contrario, la proclamación de Twain podría haber comenzado con «¿Qué demonios?» y terminó con «vómito de ángel».

Publicado originalmente: 2 de julio de 2020